miércoles, 27 de abril de 2011

TODOS LOS CAMINOS CONDUCEN A LOS MONTES DE ALBELA



Es curioso como han ido cambiando los hábitos de los vecinos que se fueron a ganarse la vida a otros lugares, antes venían a pasar el máximo de días posibles en agosto, ahora varía muchos según la edad, los mayores a partir de mayo (y con el permiso de los nietos) pueden aparecer cualquier día y pasar quince días o cuatros meses, los de mediana edad aparecen entre julio y septiembre para pasar entre una semana o dos ya sea toda la familia o parte de ella, los más jóvenes pueden aparecer algunos fines de semana o para las fiestas, y los niños con sus padres o mas tiempo si se quedan con alguno de los abuelos u otros familiares. En general aparentan tener mucha prisa, y muchos aprovechan y combinan el viaje para visitar otros sitios o hacer rutas de visitas, ya sean de Galicia u otros lugares que les coinciden de camino. Esto hace que una aldea de 100 habitantes pueda conseguir hasta más de mil personas si sumamos el baile de la fiesta. Lo importante es que no dejen de visitarnos y que sus descendientes conozcan los lugares y no se pierdan en el olvido. Que todos mantengan su choza, su palloza, su casa, su chalé, su quintana, su masía o su torre, da igual como lo llamen.
También es importante el acceso, a pesar de la lejanía de los accesos, además de los vehículos propios y autocares, cada vez más los vecinos usan el avión y el tren. Siempre llama la atención sobre todo de los que viajan por carretera con vehículo propio y podríamos añadir a este grupo los que transportan mercancías (como los que llevan productos típicos hacia las grandes ciudades) o temporalmente van a trabajar fuera, resaltan los paisajes que se ven por el camino, hay una lista interminable, creo que destacaría Castilla y León, de día con las grandes extensiones de cultivo de trigo: al principio de la primera cuando brota el cereal aparece un manto verde como si fuera la misma Galicia, al inicio del verano parece un manto dorado o un mar agitado por el viento, y en verano después de la siega parece un desierto; por la noche la visión de las constelaciones de estrellas y la Vía Láctea. Otro ejemplo sería la comarca del Bierzo como varían de color las cepas de vino, desde que brota la hoja verde hasta que se vuelve en los distintos tonos de rojizo con el otoño. Últimamente también los que vienen del este incorporan la ruta del Cantábrico, la belleza de la combinación de los paisajes de mar y montaña, el efecto del mar en la costa y en la rías. Muchos aprovechan para hacer paradas y degustar la gastronomía, otros también porque tienen familiares en esas zonas.

Tampoco nos podemos olvidar de aquellos que hacen el Camino de Santiago, muchos lo pueden comenzar aquí o cerca en O'Cebrerio, en Triacastela o Sarria.
Espero que todo sean buenos recuerdos y que sirvan para acercar más a todos aquellos que tienen algún lazo con los Montes de Albela.

miércoles, 6 de abril de 2011

UN CAMINO POR LOS MONTES DE ALBELA


HE AQUI UNA DE LAS ENTRADAS A LOS MONTES DE ALBELA, POR EL ESTE NORESTE. EL RESTO ES FACIL ADIVINARLAS.

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